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MÉTODOS DE SUMINISTRO DEL FORRAJE

El método a emplear depende primeramente de la región del país y de los cultivos que en las distintas zonas se establecen, de las necesidades del plantel, de sus instalaciones para la conservación del forraje y de los equipos necesarios.

Establecido un cultivo, para su cosecha como forraje interesa determinar el momento más oportuno para su corte en función del destino que se dará a este. La planta cortada tiene aproximadamente un 80% de humedad y un 20% finalmente aprovechable.

Al cortar la planta no se paraliza inmediatamente su actividad fisiológica de manera que su composición varia con el tiempo. Este es el momento apropiado cuya decisión es fundamental para obtener un buen forraje.

Las pérdidas en la cosecha de forrajes son sustanciales y con frecuencia pasan inadvertidas debido a que es muy difícil su observación. Se producen pérdidas en el corte cuando la máquina pasa por alto plantas tendidas o bajas o la recolección se efectúa a mucha altura, pérdidas por caída de hojas, descoloramiento por demasiada exposición al sol, fermentaciones y lixiviación debido a lluvias.

Existen tres métodos mayoritariamente empleados para cosechar y posterior suministro del forraje a los animales en base del contenido de humedad.

Cosecha de forrajes verdes

Aparte de pastoreo directo y el uso de cercos eléctricos el forraje se suministra a los animales cosechando el forraje y llevarlo a los animales estabulados y realizando su conservación mediante su ensilado.

Cosecha y suministro directo.

La cosecha directa y posterior suministro representa una muy buena alternativa al pastoreo directo. La metodología consiste en la recolección diaria del forraje y su distribución a los animales estabulados. El forraje puede quedar entero tal como lo obtendría el animal en el potrero. Los equipos no son muy sofisticados, consumen poca energía, se pueden operar con tractores pequeños. No es necesario picar el forraje, pero hay disponibles equipos que ofrecen la posibilidad. Este sistema es más conocido por su nombre en ingles " Soilinig". Las ventajas que el sistema ofrece son las siguientes:

• Se aprovecha totalmente del cultivo eliminando el pisoteo.

• Se pueden mantener más animales por hectárea.

• El pasto se corta cuando alcanza su máximo desarrollo.

• No son necesarios los cercos en el potrero

• No se compacta el suelo.

Ensilaje

Esta opción consiste en someter el cultivo a un proceso de conservación mediante una fermentación anaerobia con un alto contenido de humedad de entre un 60 a 70% acopiado en grandes parvas, zanjas, construcciones especiales y pacas envueltas en plástico. En esta forma se desarrollan los procesos de fermentación que le dan al forraje condiciones similares al pasto fresco.

La calidad del ensilaje depende además de las técnicas empleadas y del cultivo apropiado. El maíz es la planta más utilizada cuando esta se cosecha en su estado lechoso. Otras gramíneas como avena, cebada y sorgo son apropiadas. Las leguminosas necesitan procesos especiales debido a su contenido de nitrógeno propenso a sufrir fermentaciones. Las posibilidades son hacer mezclas con gramíneas. Las ventajas del ensilaje son:

• El cultivo se puede cosechar cuando las plantas están en su mejor estado.

• Es posible realizarlo en forma independiente de las condiciones climáticas.

• Hay una gran cantidad de plantas aptas para ensilar.

• Los animales de leche aumentan su producción.

• Se puede guardar por más de dos años.

• El proceso de ensilaje destruye las semillas de malezas.

• No son necesarias grandes instalaciones.

• Se elimina el peligro de incendios que tiene el heno.

• El proceso se puede mecanizar en todas sus etapas.

• Se puede suministrar durante todo el año.

Cuando se realiza el proceso de ensilado la máquina debe picar muy bien el material para facilitar la expulsión del aire al compactarlo favoreciendo de este modo las fermentaciones anaerobias. El largo del picado pasa a ser un factor muy importante en este proceso de manera que deberán regularse los mecanismos de la máquina. Se estima que tamaños de unos 5 mm es adecuado para cultivos de pasturas y de 6 a25 mm para maíz y sorgo. No son necesarios menores tamaños por que se emplea más energía y se desgastan innecesariamente los mecanismos picadores.

Durante el proceso en el silo se producen una serie de reacciones tanto beneficiosas como peligrosas que es necesario controlar.

Respiración. El oxigeno presente en el material recién cortado hace que este continúe respirando lo que hace que se consuma energía al quemarse los azúcares desprendiendo anhídrido carbónico agua y calor lo que causa un atraso en la fermentación. Para eliminar los espacios con aire es importante el tamaño del picado y comprimir el material.

Acidificación. Durante el proceso se produce fermentación acética que requiere un pH cercano a 5 desprendiendose ácido acético cuando la temperatura en el silo es de 18 a 25a y cuando el pH está próximo a los 4,2 y temperaturas de 15 a 65a y no hay oxígeno se produce la fermentación láctica. El pH finalmente llega a 3 y el ensilaje queda listo a los 20 días.

Fermentación butírica. Cuando se produce una fermentación butírica el silo queda de mala calidad, con un olor repulsivo. El principal causante son bacterias clostridium presentes en la tierra. Por esta razón la máquina no debe recoger cultivos sucios ni tierra.

Cuando el ensilaje se ha preparado adecuadamente este se presenta de color verde pardusco de olor agradable. El ensilaje de mala calidad tiene olor a mantequilla rancia, color café oscuro siendo rechazado por los animales.

Henificación.

La henificación es un sistema de conservación de un forraje mediante el cual se reduce el contenido de humedad del cultivo en el campo a niveles de un 15% a 20% que no son peligrosos para producirse putrefacciones, enmohecimientos reacciones estas que causan pérdidas en su valor alimenticio.

La henificación depende del equipo disponible y de las condiciones climáticas ya que el cultivo debe secarse en forma natural ayudado en parte por medios mecánicos que acondicionan el pasto o lo remueven para acelerar su desidratación.

Una vez cortado el cultivo su secado depende de la temperatura y humedad relativa pudiendo demorar de 2 a 3 días para poder enfardarlo. Si es necesario removerlo la operación deberá realizarse a primera hora de la mañana para evitar la pérdida de hojas. Con la enfardadora se debe trabajar después que se evapore el rocío.

Las ventajas de la henificación son:

• Es un medio excelente de conservación de forraje

• Contiene alto valor nutritivo cuando se cosecha en buenas condiciones.

• Presenta muy buena palatibilidad para los animales.

• Se facilita el transporte y comercialización.

Aparte de las buenas condiciones del tiempo para lograr un buen heno se requiere:

• Constar con la cadena de equipos adecuados

• Henificar un cultivo de buena calidad libre de malezas

• Trabajar con un contenido de humedad adecuado

• Realizar una cuidadosa regulación de los equipos

• Constar con un lugar de almacenaje

Un heno de buena calidad se reconoce por su color verde, flexibilidad de sus tallos, abundancia de hojas las que contienen de 3 a 4 % más de proteína que los tallos, ausencia de malezas y materias extrañas.

Cada cultivo tiene su momento más apropiado para procesarlo. Como regla general las diversas especies se prefiere cortarlas cuando comienzan a florecer hasta su completa florecencia. En alfalfa se recomienda cuando está entre un 10% a un 25% y comiensan a aparecer nuevos tallos basales, en trébol rosado es deseable un 50% y en las gramíneas después que aparecen las espigas.

En Seragro todos pueden publicar. tomar precauciones basicas de seguridad para evitar estafas.

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